domingo, 29 de septiembre de 2013

Un proyecto especial

Situémonos en el mes de julio, un lunes. Ocho horas de coche volviendo de los Alpes a Lleida, el día después de haber corrido la Ice Trail Tarentaise. Ocho horas sólo para darle a la batidora mental, no en mi mejor estado anímico. Aparco el coche delante de casa y compruebo los asientos para no dejarme nada tirado por ahí. En el de atrás aparece un papelito de una propaganda que nos dieron en la recogida de dorsales. Le Treg, una carrera en una región del norte del Chad, en medio del Sahara africano. Qué más da, muy complicado, demasiado dinero…

Hay conjunciones astrales que hacen que la gente decida dar la vuelta al mundo en medio de una clase de física estadística o emprender una nueva carrera universitaria mientras ojea el último best-seller paseando del FNAC a casa. El salto de tensión se produce en escasos 30 segundos, que separan la iluminación de la bombilla del punto de no retorno. En esos 30 segundos sabes si quieres o no hacer algo. En los días, semanas y meses posteriores te las apañas para conseguirlo.

Mi aparcamiento coincidió con un nueve en raya del Sistema Solar (ocho y medio para los puristas, que Plutón ya no es planeta). De repente tomó forma una idea. Hace tiempo que me rondaba por la cabeza la iniciativa de recoger camisetas y zapatillas, que se acumulan en los armarios fruto del boom del atletismo popular y llevarlas a alguno de los millones de lugares donde puedes ver críos de 10 años jugando a futbol con chanclas del 45, adolescentes de 16 cuyo dedo gordo del pie ha reventado la punta del zapato o, en general, gente de cualquier edad con 10 días la misma camiseta. De esa forma pensé que unir las dos iniciativas daba lugar a un proyecto interesante, para el cual se podría pedir colaboración, bien a través de instituciones públicas, bien a través de crowdfunding,… En fin, apareció un hilo del que tirar y me agarré con las dos manos.

En pleno fenómeno cósmico y sumido en la bola de nieve que se estaba convirtiendo en avalancha, dejé volar la imaginación rememorando tiempos pasados y el ya de por sí ilusionante proyecto pasó de la categoría de “todo” a la de “parte”. Siempre he defendido el dicho de que “vale más ser dueño de tu silencio que esclavo de tus palabras” (ahí va el refrán de turno que cae en cada post). Bien, pues voy a pasármelo por el forro. En ese momento de excitación y generación compulsiva de hormonas emprendedoras, se me metió en la cabeza que Le Treg fuese la primera etapa dentro de un proyecto consistente en hacer una carrera de ultra-distancia en cada uno de los siete continentes. No se trata de ganarlas como Kilian, ni de escogerlas con un criterio exclusivamente deportivo, sino de buscar lugares con un especial interés social y cultural y descubrir diferentes tipos de terreno y naturaleza. Como os podréis imaginar ideas no me faltan. Más adelante, algún día de otoño en que haya que mantener a flote el blog por falta de carreras, ya colgaré otro post explicando con más detalle el proyecto global.

Pero volvamos a la primera parte, que es la más inmediata. Le Treg es una carrera de 170 kilómetros en autosuficiencia y autonavegación. Eso no quiere decir que vayas en coche, sino que te las apañes para llevar encima lo que necesitas y que ellos te dan un libro de ruta, unos puntos GPS y una palmadita en la espalda. Se va a celebrar por primera vez entre el 10 y el 17 de febrero de 2014, en la región del Ennedi, al norte del Chad (podéis echarle un vistazo en www.le-treg.com, por las fotos tiene muy buena pinta). Se trata también de probar algo un poco diferente, que como toda novedad es interesante.



Para que el tema tire adelante, además de la conjunción astral que dinamita la idea, en la evolución posterior hacen falta diversos eclipses que catalicen el proceso. El primero se dio al comprobar que la organización de la carrera surgió precisamente de una iniciativa de recolecta de zapatillas y camisetas por parte de una asociación francesa. Hablé con ellos y les conté la idea. Les pareció la mar de bien y me dijeron que ellos se encargaban del transporte de Lleida a Francia y una vez ahí hasta el Chad. Una vez resuelto el tema de cómo iba la ropa, la siguiente pregunta era cómo iba a ir yo. En este punto entran en juego diferentes tránsitos de cometas en forma de personas que han ayudado y hecho posible el desarrollo de la idea, pero eso ya es un tema personal que no sólo me pertenece a mí. La cuestión es que inspirado en experiencias de otra gente decidí presentar el proyecto a la Diputació de Lleida y ver qué acogida tenía antes de seguir tirando del hilo a través de otros planes B, C,…

Y la respuesta ha sido de lo más positiva, hasta el punto que me veo en condiciones de, rascando el bolsillo en los próximos meses, inscribirme en la carrera (con viaje incluido) y seguir adelante con la iniciativa. No voy a evitar el tema que puede venir a la mente en este punto, sobre la idoneidad de otorgar subvenciones públicas en este momento, a un proyecto que tiene una componente muy importante que es exclusivamente personal. La verdad es que le di bastantes vueltas al asunto y es por ese motivo que decidí potenciar al máximo la parte solidaria de la iniciativa. Es por eso también que voy a daros el coñazo por Facebook, Whatsapp, correo postal y señales de humo, para que os animéis a vaciar el armario de todas esas camisetas que os han dado en carreras populares y no os habéis puesto nunca (yo he contado 25). Para que, todos aquellos que aún no habéis caído en la corriente filosófico-atlética del minimalismo, os deshagáis de esas zapatillas que han quedado olvidadas por haber perdido la suficiente amortiguación. Por otro lado, la idea de este tipo de subvenciones es la de difundir la imagen de Lleida en el exterior, así que se intentará incorporar de la mejor manera posible esa componente en el proyecto (tengo alguna idea pero se aceptan más sugerencias).

A nivel logístico, el punto inicial de recogida de material sería la tienda Ultra Lleida (Avenida Sant Ruf, 39, bajos; es decir, Lleida al final de Prat de la Riba a la izquierda). Aprovecho para agradecer a Dani el hacerme un hueco para ello. El horario es de 10:00 a 13:30 por la mañana y de 17:00 a 20:30 (o hasta que nos vamos los pesados que vamos a darle la tabarra).

En este sentido también quería decir que si alguien se anima a colaborar con el tema, sobra decir que es más que bienvenid@. Ahí van algunas posibilidades:
  • Tengo una, dos o cincuenta camisetas que no utilizo y me gustaría donarlas a la causa (ídem con las zapatillas)
  •  Soy de un grupo de gente que corre y entre todos igual podemos reunir alguna cosilla
  •  Correr más de 5 minutos seguidos me produce arcadas pero hago un par de clicks para reenviar el mensaje y haré correr la voz
  •  Tengo una tienda de deporte (o un amigo que tiene una tienda de deporte) en tal sitio y no hay problema en poner allí otro punto de recolecta
  •  Mi padre es Bill Gates y dice que está dispuesto a financiar el proyecto entero
  •   
Y no vale decir que “es que vivo en una casa perdida de la Alta Ribagorça y solo tengo dos camisetas, que no vale la pena”… Es igual, ya nos apañaremos. Como decía el Capità Planeta, “els petits canvis són poderosos”. Y si a alguien se le ocurre alguna otra idea o alguna otra forma de participar en el tema, sólo hay que decirlo!

Así están las cosas. Para acabar me gustaría agradecer a las personas que han hecho posible que este proyecto, por lo menos, arranque, y que tenga una idea ilusionante a la que dedicar mis ratos libres. En primer lugar obviamente a la Diputació de Lleida, que es el pilar básico desde el punto de vista económico. Por otra parte a Antoni, que me ayudó mucho a la hora de pedir la subvención, a Edu, sin el cual no hubiese contactado con Antoni (además de los buenos consejos) y a Elena, sin la cual no se me hubiera ocurrido hablar con Edu. Y por supuesto a Dani, que además de ser pieza clave en la logística, si no fuese por él sencillamente no se me hubiera ocurrido la idea.

Besos y abrazos

P.D: anyadido de ultima hora (perdon por las ny's y los acentos, estoy en un ordenador frances con un teclado extranyo...):

Bueno primero de todo muchas gracias a tod@s por el interés mostrado, por los comentarios y por la difusión!! Me ha hecho mucha ilusión ir recibiendo todas esas muestras de apoyo desde ayer, esto cada vez va cogiendo más forma!!

Por otro lado, ya tenemos punto de recogida de material en Barcelona gracias a Joan Coll. Así que los dos puntos que hay hasta el momento son:
En Lleida:
- Tienda Ultra Lleida: Avenida Sant Ruf, 39 Bajos (Tel: 973 044707)
Horario: Lunes a Viernes: 10:00 a 13:30 y 17:00 a 20:30
En Barcelona:
- Cultruta (Excursiones y visitas guiadas): Carrer Estruc, 10 Local (Tel: 634534333)
Si estais en Plaza Catalunya donde empieza Portal de l'Àngel, es ir hacia Urquinaona y la primera a la derecha es el Carrer Estruc (para más detalle www.cultruta.com).
Horarios: Martes a sabado 10-14h y 16-20h
Lunes y domingo de 10-14h

No busquéis un escaparate lleno de zapatillas Salomon, mochilas Raidlight ni relojes Suunto. Se trata del local de un amigo de cuando medíamos menos de 1,40, que organiza excursiones guiadas por rincones curiosos de Barcelona. Os imagináis la típica visita guiada para guiris? Pues esto es totalmente diferente y una opción interesante para cualquier tarde-noche. Para que no digáis que el blog no tiene sección cultural!

Seguiremos buscando nuevos puntos y formas de recolecta!

Lo dicho, MUCHÍSIMAS GRACIAS por la ayuda!!

3 comentarios:

  1. Bon dia, soc la Laura Biela de lleidaalminut.com. Pots enviar-me el teu correu a redaccio@lleidaalminut.com per poder posar-me en contacte amb tu? Moltes gràcies!

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  2. Hola, em dic Andreu i estem iniciant un projecte online d'esports de muntanya (www.repte.cat, encara en construcció). Pots fer-me un mail a andreucamprubi@gmail.com per veure com podem col·laborar? Compta amb algunes samarretes d'entrada, però mirem què més podríem fer!

    Gràcies i fins aviat

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  3. Grande Albert!! No puedes estar parado!!!

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